Cuentan que el emperador Shah Jahan amaba sobre todas
las cosas a su esposa Muntaz Mahal. Un mal día, la bella y bondadosa esposa
cayó enferma y ningún médico consiguió sanarla. En el lecho de muerte, su marido
le prometió no olvidarla nunca y así, cuando Muntaz murió, el emperador encargó
a los mejores arquitectos que construyesen el palacio más bello jamás
levantado. Y este monumento inspirado en el amor es el sin igual Taj Mahal de
Agra.
0.999.3 anonimo leyendas,
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