Hace muchísimos años, para simbolizar que el tiempo no
vuelve, los sabios griegos levantaron una estatua.
Un día, un viajero se detuvo ante ella y se atrevió a
intentar conversar.
Cuál fue su sorpresa cuando le preguntó su nombre y
ella contestó:
Me llamo Oportunidad.
¿Por qué estás de puntillas?
Para advertir a todos que sólo me detengo un momento.
¿Por qué hay alas en tus pies?
Como señal de que paso veloz.
-¿Por qué tu pelo es tan largo por delante, en la
frente?
-Para que los hombres me atrapen cuando me encuentran.
-¿Y por qué es calva tu nuca?
-Es una forma de advertir que, si no me atrapan de
frente, cuando haya pasado no podrán volver la vista atrás y atraparme.
El viajero, tras escuchar cada respuesta, se detuvo
mucho tiempo a contemplar la estatua ya muda. Y cuenta la historia que tuvo
motivos de reflexión para el resto de su vida.
999. anonimo leyendas
No hay comentarios:
Publicar un comentario