La acción arrasadora de un diluvio se intercaló con
la brillante salida del sol durante muchos días. Entonces aparecieron peces
nadando cerca de las casas. Los tobas no tenían espacio para apoyar los pies y
comenzaron a elevar el fuego hacia la copa de los árboles. Pero la lluvia
continuaba arremetiendo con más fuerza; apagado el fuego, sobrevenía el hambre.
Hombres y mujeres caían famélicos al agua, presos de las devoradoras palometas.
El diluvio pasó y el agua bajó también. Muchos murieron,
pero los sobre-vivientes se instalaron en diversos lugares y establecieron
nuevos campamen-tos.
Y otra vez el pueblo toba se reprodujo.
056. anonimo (toba)
Alguien que me diga los persobajes de esta leyenda porfa que tengo hasta el lunes
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